La Batalla del Jarama, 11 de febrero 1937

El JARAMA FEBRERO 1937

                  

Hay un valle en España llamado Jarama.

Es un lugar que conocemos demasiado bien,

Porque allí derrochamos nuestra juventud

Y también buena parte de nuestra vejez

Puente del Pindoque, en la actualidad

El comandante Molero, jefe del Iº Tabor de Tiradores de Ifni y quien dirigirá el asalto, confía el éxito de la operación, más que en un plan detallado, a la sorpresa y a la rapidez de que son capaces de desplegar sus hombres en este tipo de misiones. La compañía elegida para dar el golpe es la del teniente Nájera, y de su actuación dependerá toda la actuación.

La unidad está formada por un pelotón de infantería y una escuadra de zapadores, se complementa en un segundo escalón con una compañía y el resto de la sección de zapadores, detrás ira el grupo principal, que reúne el resto del Tabor: la misión del primer escalón es tomar y neutralizar las fuerzas que defienden el puente, mientras que el grueso se empeñara en el combate por la ocupación y defensa de las Casas de Pajares.

Mientras esperan para cruzar el río tres brigadas de infantería y una de caballería, hoy frente a ellas están 8 Brigadas republicanas en línea más otras tres en reserva; algo dispersas lo que les restará efectividad.

Desde la 1:30 de la madrugada se están acercando al punto de partida.

A las 3:00 horas los centinelas y las tropas próximas al río que defienden el puente son degolladas por unos asaltantes que con rapidez, se han aproximado al puente durante la madrugada. Al parecer los dos más cercanos han sido sorprendidos mientras deambulaban por el puente mientras que un tercero se encontraba en la otra orilla; este no se apercibió de lo que ocurría enfrente de él lo que le costó la muerte.

Avance fascista

A una señal el grupo que espera al otro lado del río, se lanzan al asalto. Los africanos se enzarzan en el cuerpo a cuerpo con los que quedan junto al puente. Aun bajo la sorpresa, adormilados y agarrotados por el frío y la humedad de la noche, franceses y belgas apenas ofrecen resistencia produciéndose 80 bajas en la 2ª compañía del André Marty. Solo consigue escapar un pequeño grupo, que consigue dar la alerta y activar los explosivos colocados en la estructura del puente.

Pero los zapadores fascistas ya habían cortado los cables de las cargas, aunque producto de la noche y la urgencia, se les paso cortar uno; por fortuna para ellos la carga explosiva que queda está situada en el otro extremo, el más próximo a la orilla republicana, y al ser detonada solo consigue que el puente se eleve un metro para caer en el mismo sitio, sin apenas daños.

El general Varela dirige la operación desde la fábrica de la Marañosa, sabiendo que todo dependía del golpe de mano y este según podía observar iba bien.

Los Tiradores de Ifni se lanzan contras las edificaciones de Casas Pajares, que también toman; pero el combate es más duro al haberse parapetados los defensores tras haber oído las explosiones, los pocos republicanos que han conseguido replegarse lo hacen sobre la carretera de Morata no respetando la consigna de no retroceder. Mientras, los zapadores comienzan a consolidar el puente y a fortificar las Casas de Pajares como punto de resistencia.

Reconocimiento republicano

La decisión que toman los republicanos es alertar a la 3º compañía del André Marty que se encontraba de reserva en Arganda para que se oponga a la progresión de los rebeldes hacia el vértice Pajares. Los batallones internacionales Garibaldi y Dombrowski cierran el paso hacia el norte, el primero entre el río y las Casas del Porcal y el segundo a su izquierda intentando enlazar con la compañía del André Marty que ocupa Pajares. Un escuadrón de caballería del PCE es enviado al sector para reconocer el terreno entre Pajares y el Pindoque; pero la artillería lo descubre y hace fuego contra ellos causándole muchas bajas.

Tomados el puente y las casas la caballería fascista, que se encontraba en la Boyeriza, alcanza los árboles y comienza a cruzar el puente, El coronel Cebollino observa el estado del puente y comprende que va a ser difícil y costoso cruzarlo; demasiado indefensos frente a la artillería y arrastrando a los animales aterrorizados que tienen que cruzar por el estrecho y largo pasillo, antes de hacer pasar a sus hombres se lo comunica al general Varela, este contesta al jefe de la caballería: ¡es necesario!.

Cuando los ingenieros comunican a Cebollino que han terminado su trabajo este ordena: ¡regimiento de vanguardia cruce el puente!, inicia el paso del Pindoque el 4º escuadrón de Calatrava del capitán Millana del 3º Regimiento, el cruce lo efectúan los jinetes a pie llevando a los caballos de la brida por la estrecha y escurridiza pasarela de los costados del puente. Por fortuna para ellos no se ha producido la reacción republicana, lo que permite a los primeros cruzar sin ser disparados por la artillería consiguiendo agruparse en el terraplén que hay al otro lado.

Trincheras republicanas

Cuando empieza a clarear comienza a disparar la artillería republicana, causando bajas entre los jinetes que se resguardan en la margen izquierda de río. La artillería alarga el tiro y bate al resto de escuadrones que espera para cruzar en la arboleda. La aviación republicana hace acto de presencia y ametralla a placer el puente y sus proximidades, las bajas aumentan y la pasarela se convierte en una pista resbaladiza a consecuencia de la sangre, provocando la caída al río de los caballos mientras los jinetes corren enloquecidos hacia el cunetón buscando su protección.

El general Pozas desde Arganda, solicita a Miaja dos batallones para rechazar los ataques rebeldes; éste, tan reticente como de costumbre, pone todas las dificultades que es capaz pero finalmente cederá presionado por los mensajes que llegan del Estado Mayor Central. Pozas intenta taponar la brecha e impedir el despliegue de los rebeldes al este del Jarama, las reticencias de Miaja impedirán que los  esfuerzos no salgan de Madrid hasta el día siguiente, cuando ya es demasiado tarde. Pozas le solicita algunas piezas de artillería, pero no solo le serán negadas, si no que Miaja le pedirá que le devuelva las que le había cedido anteriormente.

El general Miaja ha olvidado muy pronto la inestimable ayuda que le presto el general Pozas durante la Batalla de Madrid, cuando esté en contra de las ordenes de Largo Caballero, cedió tropas y materiales del Ejército del Centro.

Al Sur las tropas de la Brigada de Buruaga avanzan ocupando la Falange de Marruecos Gozquez de Abajo, que los republicanos inexplicablemente han abandonado. La IV Brigada inicia el ataque a San Martín, que como en Gozquez de Abajo ha sido abandonado por los republicanos. Ante las fuerzas de la IV queda a la vista el otro puente tan necesario para consolidar la ofensiva rebelde, le corresponde a la 2ª compañía del I Tabor  de Tetuán avanzar hasta alcanzar el Puente de San Martín, situándose en posiciones de vigilancia hasta recibir nuevas órdenes.

Tanques T- 26 en el Jarama

Mientras, en el Puente Pindoque ya ha conseguido pasar el 3º Regimiento de caballería; el 2º escuadrón de Alhucemas y los 3º y 4º de ametralladoras de Calatrava que se preparan para continuar su avance cuando por el llano en dirección a Arganda aparecen un grupo de cinco carros T- 26 como vanguardia de otro grupo de veinte que avanzan hacia el puente llegando a 600 metros, hostilizando a las fuerzas que ya lo han cruzado y a las que intentan hacerlo. Varela ordena que pare el avance de la caballería y que la infantería pase para tratar de bloquear el avance de los carros, la lucha frenética por alcanzar buenas posiciones donde emplazar tres piezas antitanques que habían conseguido pasar, y que junto con la artillería de la Marañosa, hacen fuego contra los carros y consiguen finalmente pararlos, quedando dos de ellos inutilizados y ardiendo, los demás batidos por la artillería y los contracarros   se retiran hacia Vaciamadrid.

La aviación republicana continúa sus acciones contra el puente, 11 aviones I-16 se dedican a atacar el puente, en total arrojan sobre el mismo 28 bombas de 50 kg, sin ocasionar daños de consideración, resultando alcanzado un avión cuyo piloto cae en zona republicana.

La aviación fascista también hace su aparición, pero no llegan a enfrentarse con la adversaria, por la noche la aviación de la Cóndor bombardea los aeródromos de Alcalá y Azuqueca, logrando destruir un I-15.

Brigadista herido

El desastre sufrido por el Batallón André Marty, cuyas dos terceras partes son ya bajas, obliga a situar al Dombrowsky alargando su línea hacia las antiguas posiciones que ocupaba el desafortunado Batallón Francés. El avance de los Tiradores de Ifni ha progresado alcanzando las primeras cotas del Vértice Pajares que se convierten en un hervidero de fuego y tropas que se mueven en todas las direcciones.

El Batallón Garibaldi se encarga de cerrar el paso a las tropas fascistas y establecer una línea que impida que las tropas que defienden San Martin queden cercadas, pero la orden ha llegado demasiado tarde las unidades rebeldes avanzan. En el sur las tropas de Varela realizan un reconocimiento sobre el puente de San Martín enviando tres carros. Los republicanos vuelan el puente pero no consiguen destruirlo, produciendo pequeños daños que aun permiten su utilización, Los rebeldes comprueban que el puente aun es practicable pero que está fuertemente defendido desde la orilla izquierda, lo que desaconseja el intentar pasarlo, también es confirmado por el I Tabor que se acerca y es repelido por intenso fuego de ametralladora.

El intento de recuperar el puente del Pindoque con los carros ha mostrado la vulnerabilidad de los fascistas y han retrasado aún más el avance, que ya se sale del guion preparado por Varela que teme a las reservas republicanas y teme el fracaso de las operaciones. En la cabeza de puente establecida por los rebeldes Barrón rectifica el frente, modificándolo hacia las estribaciones del Vértice Pajares, consiguiendo que sus tropas alcancen lo más alto del vértice, venciendo las defensas de la XII internacional y a continuación  despejan la zona limpiandola de reductos que aún se mantienen, acabando con dominar todo el amplio valle.

Brigadas internacionales frente a Vaciamadrid

Avanzada la tarde los republicanos vuelven a lanzar al Batallón Dombrowski en apoyo de los Garibaldi contra el puente del Pindoque desde Vaciamadrid, acompañados por 19 carros. La iniciativa fracasa el Dombrowsky, agotado se ve obligado retrasar sus líneas hacia Valdeperdices.

El día ha sido un desastre para los republicanos, algunas de sus unidades han sido aniquiladas o se han desbandado, es necesario reforzar el dispositivo con la entrada en línea de la XI brigada, que pasa a las órdenes de Mena para cerrar el boquete dejado por la XII, situándose entra esta y la 17ª Brigada, por su parte 66ª Brigada Mixta es enviada a reforzar a Chorda en Morata. La XV Brigada internacional en reserva en Chinchón debe de tomar posiciones en el altiplano de Morata, se ordena a la Brigada de carros al completo que se posicione en Morata, la 1ª Brigada Mixta  recibe órdenes de incorporarse a las proximidades del Pingarrón con la XV más a su derecha, durante la noche comienzan a llegar refuerzos a la extenuada XII, los carabineros y los carros ocupan posiciones junto a ellos.

¿ Que pasara con el Puente de San Martín